En momentos de inestabilidad e incertidumbre en los mercados, algunos inversores pueden verse desbordados por sentimientos de ansiedad, miedo y/o pánico, lo que los puede llevar a tomar decisiones de inversión apresuradas e impulsivas.

Recuperación tras caídas

En situaciones como esta, es importante tener presente que la recuperación tras una baja ha sido un patrón común a lo largo de la historia de los mercados de capitales, los cuales se recuperan exitosamente luego de una fuerte caída, como la que estamos experimentando actualmente.

Los inversores que venden en mercados bajistas, en lugar de preservar su dinero, convierten esas pérdidas en una situación permanente. En la medida de lo posible, se deben mantener las actuales tenencias y esperar a la recuperación del mercado.

Las fluctuaciones en los mercados de acciones están fuera del control de un inversor particular. Intente enfocarse en lo que sí puede controlar, evite tomar decisiones impulsivas cuando las condiciones económicas cambian y los mercados se vuelven volátiles. Revisar la distribución de los activos de su cartera para asegurar la diversificación y rebalancear su portafolio son ejemplos de cómo mantenerse alineado a sus metas financieras.

La  estrategia  de  costo  promedio,  o  "Dollar-Cost  Averaging"  en  inglés,  también  puede  ayudar  a mantenerse enfocado en el futuro y reducir el factor emocional en la toma de decisiones de inversión, lo  cual  lo  ayudará  a  seguir  con  el  plan  marcado,  incluso  en  tiempos  de  mercados  inestables  o  de inflación alta.

Market Timing

Algunos inversores deciden vender sus activos y tratar de comprarlos de nuevo a un precio más bajo. Es extremadamente difícil predecir los movimientos del mercado de valores de forma exitosa, en comparación con mantenerse invertido durante el mismo periodo de tiempo.

Se han realizado diversos estudios que muestran que el costo de esperar por el momento perfecto para invertir, por lo general, excede el beneficio de incluso una correcta predicción. Dado que pronosticar los movimientos del mercado de forma exitosa es prácticamente imposible, la mejor estrategia para la mayoría de los inversores es no intentar predecir el comportamiento del mercado en absoluto, es decir, evitar el market timing.

Los inversores pueden llegar a pagar un precio muy alto por estar desinvertidos. Perderse los mejores días del mercado tiene un impacto negativo importante en el rendimiento de una cartera en el largo plazo.

El siguiente gráfico muestra el retorno total anualizado del índice S&P 500, en diferentes escenarios:

Otro estudio muestra que, durante los últimos 20 años, el retorno anualizado del S&P 500 fue del 8.8%. Si se eliminaran de ese cálculo los mejores 10 días del mercado, el retorno anualizado del S&P 500 bajaría al 4.6%. Esta es una reducción del 48% por no estar invertido en solo 10 días, en un periodo total de 20 años. Además, si no consideráramos los mejores 30 días, el retorno anualizado del S&P500 sería de un -0.2%.

Enfocarse en el largo plazo

Warren Buffet dijo una vez que la incertidumbre es la amiga del inversor de largo plazo.

Un  inversor  de  largo  plazo  no  debería  preocuparse  demasiado  por  la  coyuntura  actual,  sino  por  el contrario, debería considerar esa situación como una oportunidad para comprar activos a bajo precio. Comprar  en  un  mercado  a  la  baja  tiende  a  reducir  el  costo  promedio  o  el  precio  de  entrada  de  una inversión que utiliza la estrategia del Dollar-Cost Averaging.

Infomración obtenida de: https://www.investors-trust.com/newsletters/docs/MarketTurbulent_spa.pdf